¿Por qué nadie sabe lo que me pasa?

Si estás pasando por una situación de dolor crónico, seguramente te habrás hecho o te estarás haciendo esta misma pregunta. Vas al médico general, después al trauma, al reuma, al de digestivo, al neurólogo y todos coinciden con un mismo diagnóstico: no tienes nada. ¿Nada? ¿y entonces por qué me duele? Te suena, ¿verdad? Lo sé porque lo he vivido durante una década de mi vida y conozco la sensación de impotencia y abandono que se experimenta. 

Y, he aquí la cuestión: ¿por qué dicen que no tienes nada?, pues porque desde el paradigma en el que te están valorando es ese el diagnóstico que describe los hechos. Lo que valora la medicina alopática es la enfermedad. Y si no existe ninguna patología observable mediante análisis, pruebas de imagen, etc., se deduce que el enfermo no tiene nada, pues no se le puede atribuir ninguna patología que lo explique.

Pero, ¿no tener ninguna enfermedad es el equivalente a estar sano? La osteopatía, en lugar de valorar la enfermedad, valora al enfermo de forma global. Los análisis y las radiografías (TAC, RMN, etc.) son la mejor herramienta que existe para observar la patología, pero son completamente ineficaces para valorar la disfunción somática, la cual es el objeto de análisis del osteópata y la que nos da la clave sobre la causa (o causas) del dolor.

¿Qué es la disfunción somática? Si entendemos la patología como una lesión visible por medio de una imagen, la disfunción somática sería aquella que se situaría por debajo del umbral crítico de la rotura de los tejidos, y por lo tanto, no sería observable mediante pruebas de imagen. El único método capaz de detectar la disfunción somática es exclusivamente la palpación, mediante un examen riguroso de la estática y la dinámica.

¿Qué significa que la osteopatía trata al enfermo y no la enfermedad? El fundador de la osteopatía, el doctor A. T. Still escribió: "El objetivo del médico debería ser encontrar la salud. Las enfermedades las puede encontrar cualquiera". Aunque esta frase no es del todo cierta, pues es obvio que precisamos de métodos de diagnóstico complejos para hallar la enfermedad, en ella queda claro cuál es la filosofía de la osteopatía: el valor que se otorga al cuerpo en tanto que organismo vivo y dinámico, en contraposición a la idea del cuerpo como un recipiente de patologías. 

Una disfunción somática consiste en la pérdida del rango de movimiento de una articulación. Esta pérdida de movilidad puede afectar al recorrido de un nervio, de un vaso sanguíneo, o involucrar a la postura desencadenando una compensación que podría ocasionar problemas en otra parte del cuerpo. El campo de acción de la osteopatía es el de las disfunciones mecánicas (las que involucran el movimiento) y en él se incluye también a las disfunciones viscerales y craneales, pues se entiende que todo en el organismo se mueve.

Ahora que ya has entendido que una pérdida en el rango de movimiento lógicamente es invisible en una radiografía o un TAC, espero que te resulte más fácil comprender por qué nadie sabe lo que te pasa. Del mismo modo espero que esta información te arroje un poco de luz y esperanza. 

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